En los alrededores de Querétaro
Pueblo Mágico de Bernal
Pocos lugares ostentan este título con tanta verdad como Bernal pues todos sus rincones saben a tradición, leyenda y magia y ni qué decir de la Peña, su máximo ícono, que es el tercer monolito más grande del mundo y la atracción de muchísimos escaladores aficionados y profesionales que lo visitan durante todo el año.
Si no eres del tipo deportista también puedes aprovechar tu visita para comprar hermosos textiles, degustar dulces típicos o desayunar las suculentas quesadillas o gorditas que ahí se venden.
Peña de Bernal
Con una altura de 288 metros, se considera la tercera más alta y escalarla ofrece una vista sin igual. Te recomendamos almorzar bien ya que la subida es bastante extenuante; lleva ropa cómoda, tenis, una botella de agua y gorra para taparte del sol.
Amealco
Es una de las poblaciones más añejas del estado con una fecha de fundación de 1538 y que recuerda a esos mismos paisajes campiranos, llenos de manantiales, riachuelos, vegetación, zonas boscosas y parajes idóneos para organizar un día de campo, practicar bicicleta de montaña o simplemente para tranquilizarte y contemplar las profundas usanzas otomíes y chichimecas de sus habitantes que suelen vestir su indumentaria típica y ofrecer sus productos a los visitantes. No te pierdas: Jardín Principal o Plaza de la Constitución, Parroquia de Santa María de Amealco y Capilla de Chalma.
Tequisquiapan
“Tequis” como se le llama coloquialmente, es un pequeño poblado al sureste de Querétaro ideal para visitar en plan pareja o familia pues lo mismo puedes disfrutar de un paseo por sus tranquilas calles coronadas por buganvilias que dar un paseo en globo aerostático o visitar sus viñedos. Sus imperdibles son: Museo del vino y el queso, Degustación de quesos en la granja de La Finca Vai, Visita guiada a las cavas Freixenet, Paseo en globo aerostático.